La casa se sitúa en segunda línea de Altea, lugar muy demandado los últimos años por su proximidad al mar y al maravilloso y colorido paseo de Altea.Perteneciente a las antíguas casas de pescadores de Altea, su fachada acompaña en armonía a la calle. Dividida en dos plantas con viviendas independientes de 95 metros cada una, la casa superior nos sumerge en el casco antíguo con su amplia terraza de 19 metros, 3 habitaciones, cocina independiente y baño.La casa inferior nos abre el espacio de la terraza, dando paso a un maravilloso y extendido patio, asimilando eso sí, las habitaciones al piso superior, del cual no disponemos de fotos todavía. Los suelos nos sumergen en el tiempo con los maravillosos hidráulicos de colores que se encuentran en perfecto estado.Con todo tipo de prestaciones cercanas, la proximidad al mar nos acomoda durante todo el año para disfrutar de los maravilloso servicios que el pueblo ofrece.Cercanía al mar azul para ti y tus invitados, y gran potencial de alquiler todo el año. Producto exclusivo del que ya no queda en Altea. Visítalo.
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